No te enfoques “sólo” en la baja reserva.

Ante el diagnóstico de baja reserva o mala calidad ovárica solemos enfocarnos en los óvulos pero esta baja reserva nos debe alertar de otras posibilidades.

Una posible endometritis o una disbiosis con ausencia de lactobacilos tiene el potencial de interferir en la implantación, y que de nada sirva haber conseguido un embrión sano.

¿Habías oído hablar alguna vez sobre la disbiosis endometrial? ¡Cuéntanos en comentarios!

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