Poco a poco, tras la primera semana de ciclo estos niveles de estrógenos van subiendo y vamos notándolo en la humedad de nuestra vulva, lo que llamamos la sensación vulvar, y también en el residuo que dejan nuestras vulvas al pasar un trozo de papel higiénico.
Este moco tiene muchas funciones, pero sobretodo es importante destacar que es imprescindible para la fertilidad ya que es el medio en el que vivirán y se deslizarán los espermatozoides dentro del cuerpo de la mujer.